Conocer y entender el mundo de las emociones es acercarnos más al reconocimiento del funcionamiento emocional que tenemos en nuestro propio ser. Es la fuente de conocimiento sobre nosotros mismos y una manera de descubrir las herramientas necesarias para el cambio que nos conducirá al equilibrio interno y a una mejor adaptación al medio.

TEST DEL ÁRBOL


Test proyectivo de la personalidad profunda.

El tronco:  nos permite evaluar: estabilidad emocional, como se siente actualmente la persona, la fortaleza de su yo y el aquí y ahora de su personalidad, pensemos que el tronco es el que sostiene al árbol.
Tronco en  ambos lados curvos: flexibilidad y adaptación al ambiente
Tronco recto  :  inflexibilidad, mucho autocontrol y rigidez.


La copa: representa la vida mental, las fantasías, la riqueza o no de la imaginación, como la persona concibe a la realidad.

Las Ramas: conforman dos cuestiones, la capacidad para establecer vínculos y la modalidad de las relaciones con los otros, pero también la capacidad de la persona para obtener del ambiente aquello que necesita.

El suelo: representa la realidad, el piso en donde uno se instala...
Suelo no se dibuja debemos observar primero la calidad de la estructura del árbol y el conjunto.


Las raíces no deberían estar presente porque representan el plano
instintivo sexual y aspectos primitivos de la sexualidad, por ello cuando se grafica implican que algo de los impulsos no puede ser bien regulado y controlado por el yo del sujeto. Se asocian cuando aparecen las raíces a una necesidad de arraigo y de mayor estabilidad que el sujeto siente que no tiene.




Arbol  endeble: debilidad de carácter, evasión de la realidad

Arbol fuerte: tiene todos los  contenidos presentes, los trazos son firmes el tamaño mediano.

Trazo  repasado:   inseguridad, insatisfacción y una necesidad de perfeccionismo.